UN PASEO POR MADRID 29 OCTUBRE 2007

Mi fin de semana no podía haber sido mejor....lo comenzé con una sesión de cine el viernes por la noche, ya un poco estresada...porque como dice mi querido bufón, o cenamos y charlamos, o vamos al cine, pero las dos cosas....y tiene razón...pero como soy tan cansina, ja,ja,ja.

El sábado madrugué, habiamos quedado a las 9:30 hrs en la entrada al Museo del Prado. Nos hizo la visita, una guía de lujo, no solo por ser buena en su trabajo, sino por ser también amiga....durante tres horas, nos mostró, las grandes obras de Vezlazquez, Goya , El Bosco, Tiziano, un Caravaio....lo que más me impactó, fueron las sensaciones que experimenté una vez procesada la información que nos aportó, sobre cada sala a la que nos asomábamos, cada cuadro que descubríamos.....
Al igual que los escritores, los pintores, y cualquier ser humano que crea algo, tiene su historia, su momento en la vida, en la época que le tocó vivir...y como todo eso afecta y se vé reflejado en sus obras.....es maravilloso y apasionante...

Todos estos pensamientos, me obligaron a "compararlos" con la vida en la que hoy me muevo, esa movil e internauta de la que en muchas ocasiones reniego....por ejemplo, al ver El jardín de las Delicias, me llevé una gran decepción, por el tamaño del cuadro....¡¡¡ pero sino es tan grande como imaginaba ¡¡¡¡, lo mismo que le pareció a la hija de mi jefe, al ver Las Meninas....entonces pensaba, eso pasa cuando vemos la foto de alguien, cuando ves su imagen, pero no su dimensión...en todos los aspectos de la palabra...o al ver las pinturas negras de Goya, dices: ¡¡ que horror ¡¡¡ pero ignoramos que en esa etapa de su vida, sufria los tormentos de la soledad, causados por su sordera y jaquecas....¿que pintaríamos nosotros si nos encontráramos en su pellejo?....y en esos momentos, disfrutas de la PINTURA con mayúsculas....increible.

Subimos por la Carrera de San Jerónimo, atravesando la Puerta del Sol y la calle Arenal, hasta entontrarnos, en la espectacular Plaza de Oriente....y allí, visitamos el Palacio Real, que era como continuar la visita ampliada desde el museo.....durante hora y media, disfrutamos, de otro cachito de historia.

Nos dirigimos a la Cava Baja, donde el Capitán Alatriste, nos esperaba en un rincón acogedor...donde la comida, la compañía y la sobremesa, fueron de un agrado absoluto...

Un día fantástico, que acabó viendo anochecer de paseo al Retiro...

Desde esta mañana, hasta esta misma tarde, que he visto a dos amigos que hacía tiempo no veía, casualmente he recibido un regalo de cada uno, que para mí, tienen un gran valor, porque me honra, que fueron comprados, simplemente, porque al verlos, pensaron en mí, y en la ilusión que me haría tenerlos....pero el gran regalo, es saber que estoy en sus corazones....y que siguen siempre ahí cuando los necesito.

Existe una belleza en el ser humano y sus circunstancias, a la que no me puedo resistir....no lo hagais vosotros tampoco.